No pases calor, encuentra tu aire acondicionado:
Ciertas medidas que puede tomar son bien simples y no requieren que un técnico de servicio las realice. Pertrecharse con estos simples conocimientos técnicos le ahorrará tiempo y dinero en un largo plazo.
Redirigiendo el aire caliente de la unidad exterior.
En el esfuerzo por llevar a cabo la unidad aún menos ruidosa, ciertos desarrolladores colocaron el tubo capilar en la unidad exterior para achicar el ruido sibilante del refrigerante en el extremo de salida del cilindro capilar.
Los tamaños de los contaminantes que existen en nuestro aire van desde 0,01 micrones a 10.000 micrones. Los virus, el humo del petróleo, los humos y las impurezas en suspensión tienen tamaños que van de 0,01 a 1 micrón. El moho, el polen, la niebla, el polvo, las nieblas y las cenizas tienen un rango de 1 a 100 micrones. El polvo emitido por las factorías de la industria pesada tiene entre cien y 10.000 micrones.
a) Si la unidad se drena por gravedad, compruebe la bandeja de drenaje para cerciorarse de que su elevación es correcta. Debe estar tenuemente inclinada para dejar que el agua baje y entre en la manguera de drenaje y se descargue al exterior del edificio.
Potencial de calentamiento global y potencial de agotamiento del ozono
Torre de refrigeración
Operaciones Durante el desempeño, se monta un termostato en el aire de retorno de la unidad. Esta temperatura se utiliza para controlar el encendido o bien apagado del torno. En el instante en que se alcanzó la temperatura entorno, el torno se apaga.
La humedad del aire asimismo se suprime al condensarse en el serpentín del evaporador. El agua goteará en el recipiente de condensación situado debajo del serpentín. El agua es entonces descargada al desagüe conectando una manguera o tubería a la bandeja. Si la descarga por gravedad es imposible debido a la restricción de la instalación, se emplea una bomba de condensados para bombear el agua al desagüe. De esta manera, la humedad se suprime de la cuarto.
Este descubrimiento dio sitio a la firma del Protocolo de la localidad de Montreal de mil novecientos ochenta y siete, un acuerdo firmado por ciento ochenta naciones que se proponen eliminar gradualmente la producción de CFC para mil novecientos noventa y cinco y de HCFC para dos mil treinta. Los nuevos refrigerantes que se están usando para reemplazar estos CFC son los HFC (hidrofluorocarbonos) y las mezclas de refrigerantes (azeotrópicos, zeotrópicos). En resumen, los cuatro refrigerantes de uso habitual que se pueden localizar en nuestros días son: